Federico Mompou: Canciones y Danzas

Federico Mompou nació en Barcelona en el año 1916 y murió el 30 de junio de 1987. Se puede consultar una biografía detallada en la web www.fredericmompou.es

Canciones y Danzas

Las Canciones y Danzas constituyen una parte extraordinariamente importante de la música de Mompou. El propio Mompou consideró que su obra se podría dividir en tres grupos, en el primero habría que considerar las piezas donde subjetivamente describe la esencia del paisaje rural catalán: Suburbios, Escenas de niños, Fiestas lejanas; En el segundo, las que se inspiran en la naturaleza (oculta y misteriosa se podría decir): Charmes, Cants Mágics, Música Callada; y en el tercero aquellas vinculadas directamente al folklore catalán: Las Canciones y Danzas.

Como referencia bibliográfica sobre esta obra, Canciones y Danzas de Federico Mompou, es obligatorio citar el libro de Nicolás Méeus “Federico Mompou, influences populaires et téchnique savante dans son oeuvre”, en la que el autor dedica 300 páginas a su estudio. Méeus habla de la confluencia en la obra de Mompou de la técnica culta y la inspiración popular.

En 1921 escribió Mompou su primera Canción y Danza. En total, son 13 para piano y una para guitarra. Hablaremos de las 13 para piano. De éstas, hay dos que son completamente originales, la nº 5 y la nº 6. La número 3 es original en lo que corresponde a la danza. Entre las demás, sólo en una utiliza temas ajenos al folklore catalán, en la número 10 donde utiliza dos Cantigas de Alfonso X El Sabio. Por tanto, en las restantes 19 (canciones y danzas) utiliza temas populares catalanes.

Dice N. Méeus que Mompou no realiza una armonización de los temas populares, sino que son “una recreación de la música popular…”

La Canción y Danza nº 1, (1921) se basa en la canción “La filla del Carmesí” y la “Dansa de Castelltersol”. En la canción Mompou ajustó la forma suprimiendo dos repeticiones del primer motivo, para darle la equilibrada estructura motívica de AABB.

En 1918 empezó a trabajar Mompou en la que sería la Canción y Danza nº 2, que reúne la canción “Isabel” y la danza “Galop de cortesía”. La canción original trata del rapto de una doncella. Existen numerosas versiones populares en Cataluña y Mompou nos la presenta con cierto carácter nostálgico.

En la Canción y Danza nº 3, utiliza “El noi de la Mare” y una sardana original. La canción original tiene doble carácter como canción de cuna y como villancico. Habla de los regalos que se le ofrecerán al “niño”. Mompou trató esta canción en un estilo más polifónico que otras. La danza, según N. Méeus, es “testimonio de una rara aptitud por parte del autor, para asimilar el folklore de su región”.

“Lo mariner” y el “Ball de Ciri” son la base de la Canción y Danza nº 4. La canción popular trata de una historia de rapto.

Como ya hemos dicho, la Canción y Danza nº 5 es completamente original, y lo curioso, es que fue concebida, en 1942, durante un sueño de F. Mompou. Según cuenta Clara Janés en su libro “Federico Mompou, Vida, Textos y documentos”: “hallábase el músico en una bodega medieval de alto techo y grandes ventanales. En torno y sentados en largas mesas que envolvía una luz ocre, una gran multitud de hombres de rostro encendido charlaba animadamente mientras bebían vino. Allí mismo, y a la vez enormemente distante, Mompou, sentado al piano tocaba aquella música de la que se ha dicho evoca el arte de los vihuelistas del Siglo de Oro, y que figura entre sus obras más significativas.” Según S. Kastner, “también se manifiestan en la red armónica de esta canción los pujos polifónicos del autor, explayándose en sutiles secuencias, imitaciones y contramotivos.”

También original es la Canción y Danza nº 6. Quizá sea esta la que tiene una mayor popularidad. Según Méeus, “la melodía es típicamente catalana, preñada de lánguida tristeza y contrasta perfectamente con el ritmo sincopado de la “rumba” que figura a continuación.” Y según S. Kastner “una canción triste, lánguida de más no poder”.

La canción y danza nº 7, está compuesta a partir de “Muntanyes regalades” y “L´hereu Riera”. De la canción, Mompou toma de entre la cantidad de versiones existentes la versión más extendida. Pere Vidal en la “Guía de los Pirineos Orientales” dice: “Esta canción es tan inherente al país como la misma tierra; no hay un solo habitante que no haya cantado la melodía si no recuerda la letra…”

“El testament d´Amélia” y “La filadora” son la “piezas” que tomó como base para la Canción y Danza nº 8. “El testament d´Amélia” es una canción típicamente caballeresca cuyo tema es dramático, una joven que se deja morir al ver que su propia madre le ha robado el marido. Ésta contrasta fuertemente con la Danza, mucho más alegre.

En la Canción y Danza nº 9, Mompou utiliza la canción “Lo Rossinyol”. En la Danza, casi original, utiliza un tema popular del pueblo “Prats de Molló” en sus compases centrales.

Como ya se ha comentado, en la Canción y Danza nº 10, Mompou utiliza dos Cantigas de Alfonso X El Sabio.

Dos temas, “La Patum” y “Turcs i cavallets” se reúnen en la Canción y Danza nº 11. La canción tiene un carácter solemne mientras que la danza es como un alegre baile que simula una pelea entre cristianos y turcos donde estos últimos son vencidos.

En la Canción y Danza nº 12 tenemos como base popular a “La dama d´Aragó”, “La mala nova”. La canción se basa en un hecho histórico. Según supone el folklorista Manuel Soleville, por su melodía, ha de ser anterior al siglo XVI.

La número trece está escrita para guitarra.

La última para piano, se basa en el tema folklórico de “Quan jo n´era petitet”.

La brevedad es un rasgo común a todas las Canciones, ya que ninguna dura más de 20 compases. Esta brevedad es a su vez rasgo común en la obra de Mompou y en la música popular.

Otro rasgo importante en la música de Mompou son los “acordes ambiguos”, aquellos cuya tonalidad no puede definirse claramente. N. Méeus dice: “No es raro, en efecto, encontrar en Mompou acordes de séptima de dominante sobre la tónica en el tono de tónica y de dominante, en razón respectivamente del grado en el que se sitúa la forma”.

Según Clara Janés el empleo de los elementos de raíz popular es lo que da a la obra de Mompou una apariencia impresionista. Sobre esto y en palabras de Gilbert Chase: “Muchos de los nuevos procedimientos que parecían invención de los impresionistas, eran corrientes en la música popular española (como) la tendencia a las armonías y melodías modales, la ambigüedad tonal, resultado del empleo frecuente de falsas relaciones y cadencias rotas, el uso sistemático de quintas sucesivas, las apoyaturas no resueltas, la complejidad métrica por cambios frecuentes de compás, y la simultaneidad de rítmica diferente.”

Terminamos este somero repaso de las Canciones y Danzas de Federico Mompou citando a Santiago Kastner, en su libro “Federico Mompou”:

“Mompou es de los grandes poetas de la música; su lugar no está entre los prosistas prolijos del arte sonoro. No es Mompou más pequeño que los prosistas sinfónicos por haberse dedicado también a la composición de dilatadas formas musicales. El arte no consiente criterios que se dejan guiar por el tamaño exterior de las obras. Es la calidad lo que importa. Vale más una miniatura perfecta que un enorme lienzo embadurnado…”

“…Desde luego, las “Canciones y Danzas” de Mompou existen para ser escuchadas o tocadas y no se prestan a ser descritas con palabras que, por escogidas que sean, nunca acertarán en dar una noción exacta del hermoso ambiente poético contenido en esta música…”

Bibliografía: Clara Janés, “Federico Mompou. Vida, textos y documentos.” Fundación Banco Exterior, 1987. | Santiago Kastner, “Federico Mompou” Consejo Superior de Investigaciones Científicas , 1950.

Fotografía en el texto de introducción: "Frederic Mompou i Dencausse - bust" by Jordiferrer - Own work. Licensed under CC BY-SA 3.0 via Wikimedia Commons.